Después de lo acontecido hace unos días y tras meditarlo mucho he tomado la desición de hacer un llamamiento a todos los jóvenes de este pueblo. También hacerlo a las autoridades, a pesar, de nuestras diferencias políticas. Es muchísimo más importante la vida de una persona que tirarnos de los pelos los unos a los otros, pues al fin y al cabo todos nosotros nos retiraremos del mundo de la política, pero aún así, a diferencia de muchos jóvenes de este pueblo, seguiremos en este mundo. No es coherente que en los últimos años se hayan derramado tantas lágrimas por los fallecimientos de distintos jóvenes de este municipio. Jóvenes que estaban en la flor de la vida, que apenas habían conocido lo bello que es vivir pero que desafortunadamente ya no estarán presente para descubrirlo.
Con esto no quiero responsabilizar a nadie, pero si hacer un llamamiento tanto a jóvenes, como a padres y distintas autoridades para que protejan a sus niños desde pequeños. Busquen alternativas para que las generaciones venideras tengan un campo de oportunidades amplio, tanto sean estudios, laborales y sobre todo de ocio. Los jóvenes tienen que tener actividades donde emplear su tiempo.
Los cambios que se producen en la adolescencia se manifiestan no sólo en el cuerpo sino sobre todo en la mente. La maduración psíquica conlleva unas adaptaciones emocionales y sociales a la nueva situación que nos preparan para la edad adulta. Por eso digo que hay que preparar a los jóvenes desde pequeños para cuando llegue a esta etapa, su "trasformación" no sea tan brusca. Yo soy joven y todos en algún momento hemos pasado por esto.
Los jóvenes al entrar en la adolescencia buscamos la independencia para adentrarnos en el mundo adulto y encontrar nuestra identidad personal. Pero en algunas ocasiones no contamos con una previa introducción que nos diga cómo hacerlo sin cometer algún error. Yo creo que todo el mundo, desde que nace hasta que llega a mayor siempre tiene un patrón que le facilita el camino de la vida. Es el que le dice por aquí si, o por aquí no. Para algunos adolescentes es un periodo de incertidumbre, pero para otros es una etapa de amistades internas, de más independencia, y de sueños de planes que van a realizar en el futuro. También es una etapa de descubrimiento. Descubrimos nuestra identidad y personalidad. Además es una etapa de inmadurez en busca de la madurez.
Para muchos de nosotros es la etapa más importante y por eso debemos darle la importancia que le merece, pues de lo que aprendamos en ella, nos servirá para tomar un camino u otro, que marcará la diferencia. Debemos ser concientes de lo que ha pasado durante los últimos años y reflexionar mucho sobre esto.
Nosotros somos el futuro y por lo tanto somos nosotros los que con la ayuda de nuestros allegados debemos tirar del carro y marcar la diferencia. Al igual que tenemos nuestras obligaciones como ciudadanos, contamos también con nuestros derechos, que debemos hacer cumplir.
A las autoridades competentes si me gustaría pedirles que también se sienten a pensar sobre lo sucedido para que vean que no es ninguna locura lo que estoy diciendo y que si nos tenemos que sentar y hablar del tema pues que no existe ningún tipo de problema. Lo que no quiero y seguramente coinciden conmigo, es que se den más casos de este tipo. Ahora que podemos tiremos todos juntos para en un futuro evitar derramar más lágrimas.
A mis jóvenes decirles que luchemos todos juntos. La adolescencia es muy dura pero que si se siguen las pautas y se sigue a un buen patrón saldremos del paso muy bien siendo independientes y teniendo la madurez precisa.
Tamara Jorge, Secretaria de Organización de Juventudes Socialistas.
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